Mantenemos el desarrollo. Nos empezando a sentir cómodos con él.
Hoy tocaba salida, el día se había levantado con el suelo mojado y nubes amenazantes en el cielo. Una vez más había pereza, pero otra vez más mereció la pena vencerla. Tenía pinta de que hoy ibamos a entrenar la lluvia... al final solo nos cayeron 4 gotas.
La ruta ha estado muy chula (llevamos una buena racha y es que merece la pena prepararlas con antelación). Era el segundo intento en llegar a Torres de la Alameda, en el primero no llegamos porque Loeches nos pareció suficiente, tanto por la distancia como por las vistas que tuvimos.
Pero esta vez si que lo hemos conseguido llegamos a esta población, que tras consultar wikipedia sabemos que son muchos los siglos que tiene de existencia... merece la pena profundizar en la historia de estos pueblos, y es que en la distancia lo primero que se aprecian son chalets y chalets pareados que hacen pensar que es una ciudad dormitorio más en las proximidades de una gran ciudad, sin embargo cuando llegas más adentro te encuentras por ejemplo con La Iglesia de la Asunción (S.XVI) y su claustro portificado que hacen de Torres un sitio singular... me gustó.
Tras la salida de hoy seguimos hacia el Camino, estamos poco a poco anodizándonos, término que me ha llamado la atención al pasar por un gran polígono industrial y que perféctamente me ha explicado Mr GE. En nuestra historia, anodizándonos significa ir cogiendo forma para tener la mejor resistencia y durabilidad de cara a lo que nos espera., no a través de la electrólisis pero sí a través de hacer deporte, pasárnoslo bien, y como hoy aprender cosas nuevas... que más se puede pedir...
Foto tomada durante la salida... Iglesia de la Asunción, estilo plateresco.
1 comentario:
Verbo fácil.
Anodizado me dejas.
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